sábado, 24 de noviembre de 2007

mañana de otoño

el de él no puede ser un deseo profundo
el mío sí

lo conocí en otoño
se llamaba mañana de otoño
era sensible? era romántico? soñaba?
creí
y mucho, en él

esperaba mañanas y nochecitas sentada frente al monitor
su entrada y sus letras
acallaba mis bostezos en nombre de encontrarlo
me hacía reír pensar confrontar dos mundos
su origen distinto al mío
creció en el interior y
vivió mucho más que yo
viajaba y tenía obligaciones con sus hijos
creí
y mucho, en él

el día que nos conocimos hubo una conspiración del destino
me acompañó a ver si mi padre estaba vivo
entró en mis raíces temprano
comió la comida de mi madre y se sentó a nuestra mesa
el primer día
creí
y mucho, en él

trataba de comprender su vida
yo
que siempre desconfié de casi todo
nos veíamos siempre los días de semana
sí señora lo sé no me di cuenta
no conocí su casa
ni su familia o amigos
señora, lo sé
no quise o no pude ver
creí, y mucho en él

y una noche la casualidad
me contó lo que no quería saber



1 comentario:

Anónimo dijo...

Duro,pero con esa cualidad que sólo poseen quienes han visto a la vida en calzoncillos y sin anestesia. Me gustó

Willy