sábado, 1 de septiembre de 2007

te seguí

prisionera enjaulada
mareada sedienta
absuelta de pecado ya
esas manos tuyas errantes
y tu boca
sabedoras de completudes
me animaron a abrir la puerta del sueño simple
capaz era el momento de soñar, no sé
te seguí al río comimos pescamos amamos
miramos a los ojos
salimos a dar un paseo
sin pensar

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Andrea: Todo el mundo en ese instante mágico que contás...realidad? sueño? deseo? qué importa! a fin de cuentas es todo lo mismo.Lo que vale es la particular mirada sobre ciertos momentos que uno quiere resguardar a través de la poesía. No importa que no sea "vivencial" siempre lo es!.Hermoso poema. Te admiro.
Willy

Anónimo dijo...

poesia , que refleja un momento intenso vivido, se acerca a la realidad de poder disfrutar de vivir, con el solo hecho de poder tomar para si, instantes simples ,cotidianos, donde el mundo es uno o dos , es decir un mundo dentro del mundo

Unknown dijo...

Andrea: gracias por la invitación.
Besos.
Willy