sábado, 31 de marzo de 2007

las letras

no quiero decir cielo
infierno renuncias o
castillos de arena

en mi escritorio yacen
las letras
que embriagaban al oído
cuando me arrastró por un futuro
fantasma
que nunca fue mío

y la gota
ahora lágrima
que golpea y cae
como un pesado cincel
cortando el aire que queda

del amor sólo veo la
lastimada aúrea que acaramela la foto
todavía

sus no
van a moldear mi risa
hasta que el espacio vacío
de su nombre se funda
con el pétalo perfumado del ayer

1 comentario:

Anónimo dijo...

Andrea, por fin pude leerte, tus poemas me hacen acordar a algunos mios muy catarsis, muy como uno es,
muy decirselo a... Igual son transparentes nada cripticos. Adelante, pone en el blog algunos otros.